Frisoli TM, Schmieder RE,
Grodzicki T, Messerli FH; European Heart Journal (Oct 2011)
Se ha demostrado que las
modificaciones del estilo de vida disminuyen la presión arterial (PA):
1. La pérdida
de peso tiene un valor innegable, con el índice de masa corporal (IMC) como buen
marcador en la relación peso-PA; parece haber una relación lineal entre el peso
y la PA, así, a medida que se pierde peso, la PA desciende más.
2. La
actividad física también ayuda a disminuir la PA, pero a mayor ejercicio no hay
mayor beneficio, ya que se alcanza una meseta luego de la cual no hay mayor disminución
de la PA, así que incluso una modesta actividad física pueden tener un efecto
sobre la PA.
3. Una dieta
rica en frutas y vegetales, y baja en grasas totales saturadas, es efectiva
para reducir la PA.
4. Se ha
demostrado mayor beneficio con aumentar la ingesta de potasio, que reduce la PA
y el riesgo de AVC.
5. La
vitamina D está asociada con disminución de la PA, pero no hay una relación
causal establecida.
6. Los
flavonoides, encontrados en la cocoa y moras, tienen un modesto beneficio sobre
la PA.
7. Ni la
cafeína ni la nicotina tienen un efecto marcado sobre la PA (pero el consumo de
tabaco aumenta el riesgo de infarto de miocardio).
8. Hay una
relación lineal entre consumo de alcohol y la PA, pero el consumo de 1 vaso por
día para mujeres y 2 para varones parece ser incluso beneficioso, pero este
beneficio se atenúa si se consume más de lo recomendado o se lo consume sin
comida.
En general, el mayor beneficio de disminuir la PA se obtiene cuando se
incorporan múltiples modificaciones del estilo de vida en forma simultánea, más
que en forma aislada.